miércoles, 16 de febrero de 2011

Hoy estoy ñoña

No sé por qué, pero a veces me pasa. Puede ser el día más feliz de mi vida o el más triste, eso no importa. De repente y sin venir mucho a cuento empiezo a sentirme mal o a ponerme tristona, y casi nada de lo que haga o piense puede cambiarlo. Ya sé que normalmente soy un poco ñoña, pero en estos momentos no hay quien me aguante, así que prefiero apartarme un poco del mundo, darle mil vueltas a todo, pensar qué me estará pasando, y me dejo llevar por mis miedos, me planteo abandonar cualquier cosa que me haga dudar, alejarme de las personas por miedo a pasarlo mal... Y me derrumbo, es bastante inevitable, lo bueno es que igual que viene se va, así que lo único que se me ocurre hacer en estos casos son dos cosas: o meterme en la cama y ya mañana será otro día, o ponerme canciones tristes para torturarme un poco más. Porque además tengo súper fichadas las canciones que me joden en esos momentos, y son las que más me apetece escuchar, no me motiva escuchar canciones de subidón, solo quiero hundirme del todo para empezar a subir otra vez cuanto antes.  Lo bueno, es que esto me ha pasado tantas veces que ya voy empezando a conocer un poquito los motivos, eso sí, no me gusta nada, porque me temo que es algo que me seguirá pasando durante toda mi vida, pero bueno... ¿hay algo mejor que ponerse a llorar escuchando una canción bonita mientras te abrazas a tu peluche favorito? Es de los mejores momentos que hay en el mundo (y no, no es ironía), me gusta casi tanto como llorar con el final de las películas de amor cuando los protagonistas por fin acaban juntos.

Y ya está, ahora que me he desahogado, seguiré con mi tortura un ratito hasta que me vaya a dormir. Espero que vosotros estéis un poquito más contentos hoy.

No os mando besos, porque estarán un poco amargos y quizá mojados por las lágrimas que resbalan por mi cara y que alguna siempre acaba por ahí.

Chaito.
MiKo

No hay comentarios:

Publicar un comentario